El gobierno porteño buscará bajar en forma significativa el peso de la deuda pública en dólares para reducir el riesgo de una eventual devaluación de la moneda. Así lo indicó a LA NACION el ministro de Hacienda porteño, Martín Mura, quien dijo que pasarán de un esquema en el que la deuda en dólares ocupa el 95% del total (entre bonos colocados en el mercado en divisas y en dollar-link, además de préstamos de entidades multilaterales) y el 5% restante está en pesos. "La estrategia es que, para 2019, el 50% de la deuda esté en dólares y el 50% restante en pesos", expresó Mura en su despacho.
La Ciudad, que tiene una calificación de AA+ para la agencia de calificación de riesgo Fitch, tiene una deuda cercana a los US$ 2800 millones, equivalente al 30% de los ingresos. En 2002, después del default de la deuda nacional, ese porcentaje estaba en el 80%.
El funcionario del gabinete de Horacio Rodríguez Larreta afirmó que ya cubrió las necesidades financieras de este año, a través de dos emisiones realizadas por 300 millones y 530 millones de dólares, respectivamente.
La Ciudad toma deuda para aplicarla a obras. Las más importantes son:
* El proyecto del arroyo Vega para evitar inundaciones en la zona de Belgrano, que demandará US$ 200 millones, de los cuales 100 millones se desembolsarán este año con recursos del Banco Mundial. La finalización está programada para 2019.
* La urbanización de la Villa 31, con US$ 170 millones (50% este año).
* El Paseo del Bajo, con US$ 400 millones aportados por la Corporación Andina de Fomento (CAF), de los cuales 50 millones se utilizarán este año. Terminará en 2019.
* La construcción del edificio del Ministerio de Educación y de una escuela en la Villa 31, con US$ 100 millones otorgados por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
* La Villa Olímpica, con US$ 50 millones aportados por la CAF, que terminará este año.
* El tramo del Metrobus de Leandro N. Alem y Paseo Colón, con US$ 50 millones aportados por la Corporación Interamericana de Inversiones, del BID.
A partir de la colaboración con el gobierno nacional, la administración porteña logró agilizar el desembolso de los préstamos de las entidades multilaterales y regionales, destacó Mura.
Pero también logró un importante refuerzo de sus ingresos a partir de la moratoria porteña (que, como informó LA NACION, recaudó $ 3400 millones) y del aporte que ahora realizan -luego de 10 años de discusión judicial-los dueños del casino de Puerto Madero y de las tragamonedas del hipódromo de Palermo a la recaudación porteña. Ambas firmas aportan $ 50 millones mensuales a las arcas públicas, de los cuales el 70% se destina a programas sociales.