Oct
05
2018
0
By editor
Aunque la cabeza quiere ser prudente, en especial la de los protagonistas, los ojos se van para otro lado. El morbo está instalado y es imposible esquivarlo. Porque aunque Boca aún esté sintiéndole el gustito a la clasificación a semifinales de la Copa Libertadores y que, en esa instancia, deberá verse las caras con Palmeiras -un viejo conocido tanto en el comienzo de la década pasada como en el primer semestre de 2018-, las fantasías se mueven directamente hacia la final y la posibilidad de disputarla frente a River.
Lee la nota completa en: