Jun
15
2017
0
By editor
En diciembre de 2015, Ramón Mestre inició su gobierno de la ciudad de Córdoba con una herencia complicada: la de su primer mandato. Por factores externos (kirchnerismo) e internos (desaciertos operativos), esa primera etapa no había tenido la luminosidad que deseaba, más allá de que logró acceder a un segundo período bajo el paraguas de la alianza Cambiemos.
Con un mayor flujo de recursos, que le permite desarrollar un plan de obras barrial (“la ciudad es un obrador”, dice), el intendente estaba intentando reacomodar su figura política hacia una candidatura a gobernador en 2019.Por el respaldo en la opinión pública es que el intendente no cedió a las presiones durante todo el fin de semana.
Política
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