El municipio no quiere asistir este año a las concesionarias y tiene previsto que la suba del boleto sea en noviembre. Pero la presión inflacionaria se siente, las empresas ya presentaron la documentación sobre el desfasaje de la actual tarifa y la solución depende de una decisión del intendente, Ramón Mestre. Las opciones son dos: o se subsidia o se aplica un aumento en el pasaje.
El vicepresidente de Fetap, Gustavo Mira, recordó que el momento en que se equilibraron los números del sistema fue el 10 de noviembre pasado, cuando comenzó a regir el último aumento a 15,38 pesos.En Transporte de la Municipalidad admiten que el mes próximo se deberá atender el reclamo de las concesionarias. Y si se decide no cubrir la diferencia de costos, el aumento se produciría en agosto.
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