Un favor de Sturzenegger a Macri

Tal vez Federico Sturzenegger, presidente del Banco Central, haya hecho ayer más de lo que cree por el gobierno de Mauricio Macri. En la disputa ya casi teológica entre metas de inflación y metas de crecimiento que se da dentro de la administración, la autoridad monetaria decidió mantener altas las tasas de interés. Es cierto que teóricamente las altas tasas de interés pueden enfriar la economía (hay economistas que dudan de que ese sea el caso argentino), pero la opción era peor: un nuevo salto del precio del dólar hubiera provocado otro aumento de la inflación. En rigor, cualquier decisión del Central hubiera sido (y es) riesgosa para una economía que viene de un mes, diciembre, con una alta tasa de inflación (alrededor del 3 por ciento). También la inflación anual superó en 2017 en cinco puntos la inflación estimada por el Gobierno.